Rol de los especialistas en control de infecciones y epidemiología hospitalaria

Por: Zunilda Garay zunichamorro82@hotmail.com, Irma Riquelme, irmariquelme2007@gmail.com, Juan Daniel Ovelar, Eliana Pino, Lorena Skovran y Fabio Zárate.

La prevención y el control de infecciones está basada en evidencia que tiene como objetivo reducir las infecciones asociadas a la atención en salud (IAAS) en pacientes, personal intrahospitalario, y visitantes.  Adquirir conocimientos y habilidades en prevención y control de IAAS tiene como objetivo contribuir al proceso de mejora continua de la calidad de la atención hospitalaria para convertirse en un miembro activo.

La implementación de programas de prevención y control de infecciones (PCI) en los países no es una tarea sencilla. El escenario general incluye; la falta de personal especializado, el solapamiento de funciones y presupuestos limitados o inexistentes (1).  La Enfermera de Control de Infecciones es garante de la seguridad del paciente, tiene una visión integradora de la asistencia y los cuidados y una actuación estratégica que no sólo contribuye a la seguridad del individuo, sino de la sociedad en general. Entre otros puntos, la Enfermera Experta en la Prevención tiene un papel crucial en la gestión de la información, la formación, el asesoramiento social y los recursos humanos y materiales, especialmente en situaciones de alerta sanitaria como la actual.

La importancia de las directrices, la formación y la capacitación en la implementación de los Programas de Prevención y Control de Infecciones: Un aspecto importante y transversal a ambos componentes básicos era que tanto las directrices como los lineamientos de la capacitación podían ser nacionales, pero debían implementarse y adaptarse operacionalmente en todos los niveles locales. En este sentido, el nivel central debe proveer guías y recomendaciones para que se realizará entrenamiento en los establecimientos de salud.

Se considera conceptualmente que la competencia es la articulación de tres dimensiones: conocimientos, habilidades y actitudes, necesarias para alcanzar un determinado objetivo.

Las Infecciones Hospitalarias cobraron mayor interés cuando a mediados del siglo pasado una pandemia de enfermedades causadas por Staphylococcus azotó a los hospitales públicos de Europa. Fue así como a fines de 1959 -en Gran Bretaña- se diseñó un nuevo proyecto para el Control de las Infecciones, quedando con él planteada una respuesta innovadora, que consistía en emplear los servicios de una enfermera para el control de las infecciones.

Años después, en los Estados Unidos, la enfermera Key Wenzel se convirtió en la pionera de esta actividad profesional. Fue designada como la figura central del Programa de Control de Infecciones en el hospital de la Universidad de Stanford.

El/ la especialista en control de infecciones y epidemiología hospitalaria debe ejercer dos tipos de poder, poder de referencia y poder de experto. Ambos se sustentan en el conocimiento y la capacidad de trabajo y comunicación para realizar diagnósticos de situación, valorar factores de riesgo y planificar y ejecutar acertadamente medidas de control de infecciones. La medida que demuestra el grado alcanzado en el ejercicio de estos dos tipos de poder, está determinada por el número de consultas que recibe, las estrategias desplegadas para lograr la adherencia del personal a las recomendaciones de control de las infecciones asociadas a la atención de la salud (IAAS), el impacto del Programa de Control de Infecciones Hospitalarias en el funcionamiento general del hospital y la efectividad de las redes de trabajo que haya sido capaz de crear en el ejercicio de sus funciones (8,9). En Paraguay se inicia la Vigilancia de Infecciones asociadas a las IAAS en el
año 1992 en dos instituciones pioneras en el tema, el Hospital Nacional (MSP y BS)
y el Hospital de Clínicas (FCM-UNA). Cada una de estas instituciones trabajaba en
forma independiente y con metodologías y criterios diferentes de vigilancia.  Actualmente se cuenta con un programa de Prevención y Control de IAAS; implementadas en varias instituciones públicas y privadas, donde la capacitación y voluntad política son esenciales; el éxito de estas intervenciones requiere de la participación de un equipo multidisciplinario (10).

Se pretende destacar un impacto positivo en términos de una mayor visibilidad y conciencia de los programas de Prevención y Control de IAAS y un aumento de normativa, capacitación y dotación de recursos humanos. Los retos que había dejado la pandemia COVID-19 figuraban posiblemente la formación de una generación de profesionales de prevención y control de infecciones y la necesidad de elaborar una hoja de ruta para la línea estratégica a nivel nacional, para su aplicación en los servicios de salud.