DÍA MUNDIAL DE LA SEGURIDAD DEL PACIENTE 2022: POR UNA MEDICACIÓN MÁS SEGURA

El 17 de septiembre, se ha celebrado el Día Mundial de la Seguridad del Paciente, bajo el lema “Medicación sin daño”. Fue instaurado este día en el 2019 por la 72a Asamblea Mundial de la Salud mediante la adopción de la resolución WHA 72.6, titulada «Acción mundial en pro de la seguridad del paciente». La celebración anual de este día, promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), tiene como finalidad contribuir a la sensibilización frente a la necesidad de promover acciones para fomentar la seguridad en la atención sanitaria de la población, prioridad a la hora de buscar ofrecer una atención de calidad.

Cada año se selecciona un nuevo tema sobre un asunto prioritario para la seguridad del paciente, con el fin de resaltar su importancia y hacer un llamamiento a la acción urgente para abordar la cuestión. Este año 2022 el tema escogido es la «Seguridad de la Medicación”. Todos, en algún momento de la vida, necesitaremos de los medicamentos para tratar o prevenir dolencias o enfermedades. Sin embargo, los medicamentos pueden llegar a causar daños graves si se almacenan, prescriben, dispensan o administran indebidamente, o si se controlan de forma insuficiente: entre las situaciones de alto riesgo.

Las prácticas de medicación poco seguras y los errores de medicación son una de las principales causas de daños evitables en la atención de salud en todo el mundo. Los errores de medicación se producen cuando las deficiencias de los sistemas de medicación y los factores humanos, como el cansancio, las malas condiciones ambientales o la escasez de personal, afectan a las prácticas de prescripción, transcripción, dispensación, administración y seguimiento, lo que puede provocar graves daños, discapacidades e incluso la muerte a los pacientes. La actual pandemia de COVID-19 ha exacerbado significativamente el riesgo de errores de medicación y los daños conexos. Esto ha impulsado a las OMS a elegir el lema “Medicación sin Daños” para el Día Mundial de la Seguridad del Paciente este año.

El tema se basa en los esfuerzos actuales del Reto Mundial de la OMS por la Seguridad del Paciente: medicación sin daño. También proporciona un impulso muy necesario para tomar medidas urgentes con miras a reducir los daños relacionados con la medicación mediante el fortalecimiento de los sistemas y las prácticas de uso de los medicamentos. El lema del Día Mundial de la Seguridad del Paciente 2022, «Medicación sin daño», pretende centrar la atención en conseguir que el proceso de medicación sea más seguro y esté libre de daños, e impulsar la acción relativa al Reto haciendo un llamamiento a todas las partes interesadas para que den prioridad a la seguridad de la medicación y aborden las prácticas poco seguras y las deficiencias de los sistemas, centrándose especialmente en las tres causas principales de daños evitables derivados de la medicación: las situaciones de alto riesgo, las transiciones asistenciales y la poli farmacoterapia.

Es importante considerar que el modelo actual de atención de la salud introduce al paciente y al profesional en sistemas altamente complejos, donde: a) se utilizan tecnologías en permanente evolución, b) participan diversos profesionales y c) se generan escenarios de riesgo de distinta magnitud. Estas situaciones ameritan una mayor cantidad de controles para garantizar los mejores resultados, disminuir riesgos y mejorar la seguridad del paciente. De ahí que desde hacer varios años se considere a la seguridad del paciente un principio fundamental de la atención sanitaria, donde tenerse en cuenta a todos los agentes que integran el equipo de salud: los profesionales (médicos, enfermeros, odontólogos, psicólogos, kinesiólogos, farmacéuticos, bioquímicos, etc.), el personal de ayuda (camilleros, etc.), el administrativo, el de mantenimiento, el de limpieza, el de seguridad, etc. En definitiva, se debe “mirar hacia adentro” en la estructura organizacional y no dejar ningún área excluida.

En Paraguay varios sectores han venido haciendo esfuerzos a través de diferentes estrategias para mejorar la seguridad de los pacientes en la asistencia sanitaria. Aunque no contamos con mecanismos que evidencien sus resultados si es posible percibir que la conciencia de los profesionales sobre los riesgos que conlleva cualquier proceso asistencial se ha instalado y se demuestra por un interés creciente en adoptar prácticas más seguras.

Desde el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS) con su firme compromiso de elevar la calidad de la atención en salud para beneficio de la población paraguaya ha aprobado la Política Nacional de Calidad en Salud 2017- 2030, que busca impulsar y contribuir a una atención sanitaria de excelencia, centrada en las personas y sus necesidades y concibe a la misma como una responsabilidad de todos los que forman parte del sistema de salud. En la búsqueda de un cambio sostenido y significativo de nuestro sistema de salud, es fundamental considerar el desarrollo e institucionalización de una “cultura de la calidad y la seguridad” que involucre a todos los niveles del sistema. Además, desde el 2021 se cuenta con una Estrategia Nacional de Gestión de la Calidad en Salud que orienta las acciones y que reconoce la necesidad de fortalecer la calidad en la atención a la salud, orientando la práctica clínica a un nivel de calidad más elevado impulsando el uso de guías y protocolos; aumentando el enfoque hacia los usuarios, su percepción y su seguridad; configurando instancias en todos los niveles de la red que apoyen esta mejora continua de la calidad; y se constituye en un hilo conductor que orienta al Sistema de Salud de Paraguay a acelerar el logro de objetivos y metas sanitarias.

Como parte de su rol rector y dentro de las acciones de fortalecimiento institucional el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, en el 2019 ha creado la Dirección de Calidad dependiente de la Dirección general de Gabinete, con la finalidad de impulsar el cumplimiento de la Política. Dentro de la misma se crea el Departamento de Seguridad del Paciente con el objetivo de promover las estrategias que mejoren la seguridad del paciente en los procesos asistenciales. En este sentido, se ha venido promoviendo la elaboración, actualización y uso de guías, protocolos y lineamientos técnicos que estandarice los procesos asistenciales como un medio para disminuir la variabilidad, así como disminuir los riesgos y errores. Se cuenta actualmente con los siguientes documentos aprobados: Protocolo de identificación correcta del paciente en los procesos asistenciales, Protocolo de prevención y reducción de la frecuencia de caídas, Protocolo de prevención de úlcera por presión, Protocolo de seguridad en la utilización y manejo de medicamentos, Protocolo de seguridad transfusional y Lineamiento técnico de carro de paro.

Este año para conmemorar el Día Mundial de la Seguridad del Paciente se ha promovido una serie de acciones dirigidas a implicar a las principales partes interesadas en la elaboración y aplicación de estrategias destinadas a mejorar la seguridad del paciente, haciendo énfasis en la reducción de los daños graves y evitables relacionados con la medicación.

Al igual que años anteriores la Dirección de Calidad ha organizado una serie de Seminarios Web dirigidos a todos los profesionales de salud del Sistema Nacional de Salud, gratuitos, donde se busca promover prácticas seguras. Entre los temas abordados se encuentran “Principales retos de la medicación”, “sistema de tratamiento para la calidad del aire interior en establecimientos de atención de la salud”, «mejorando la calidad de los servicios de enfermería», “trabajando juntos para combatir la Resistencia antimicrobiana y situación regional de programas de optimización antimicrobiana”, “estudios fármaco epidemiológicos y la seguridad del paciente”, “medicina crítica y la seguridad del paciente” y “servicios farmacéuticos clínicos: conciliación de la medicación”, “medicina crítica y la seguridad del paciente” y “servicios farmacéuticos clínicos: conciliación de la medicación”, «Lineamientos estratégicos para promover la seguridad del paciente en Paraguay», «protocolo de seguridad transfusional» y «Preparación y administración del medicamento Zolgensma para pacientes con AME».

Además, para potenciar la divulgación de esta campaña, el edificio principal del Ministerio se ha iluminado de color naranja, así como centros de trabajo, monumentos icónicos o lugares más conocidos a nivel mundial.

Entre todo es posible avanzar en calidad y seguridad del paciente para ello, las estrategias de mejora deben enfocarse a introducir un cambio en la cultura de las organizaciones para convertirla en organizaciones inteligentes basadas en la confianza y no en el recelo. Este cambio cultural debe apoyarse en unos buenos registros, en la gestión de los riesgos y en la implicación de los pacientes y profesionales. Y no debemos olvidar que la seguridad de los trabajadores también se traduce en la seguridad de los pacientes.