PRIMERA NATIVA EN EGRESAR DE LA FACULTAD DE ENFERMERÍA

Por Jorge Acosta

Koke.cris.jac@gmail.com

Las ganas de superar con el deseo de ayudar son las llaves de la puerta del éxito y no tiene raza ni color. En este caso, las ganas de superación y las ganas de ayudar al semejante tienen nombre de enfermería y es Mónica Palacio, hoy flamante enfermera egresada de la FACISA UNE del Alto Paraná, ella es miembro de un pueblo originario de la parcialidad Ava Guaraní (hombre guaraní en español) que habitan en la zona del Alto Paraná. En una entrevista la Lic. Mónica Palacio, nos cuenta su historia de cómo eligió ser enfermera.

 

Relata que su entorno le inspiró, pues parte de su niñez y su adolescencia había pasado con una pareja de profesionales de la enfermería, menciona así a la Lic. Laudelina Borja y su esposo el Lic. Bartolomé Miranda quienes trabajaban por la comunidad de su parcialidad, entonces, de ahí nació en ella las ganas de ser también, enfermera para ayudar y cuidar a su comunidad.

 

Pasaron los años dice Mónica…y estudio la Docencia Básica pero, no le satisfizo, no era la profesión que ella quería, la de ser enfermera, entonces como si el destino jugara a su favor, en un tiempo conoció al Dr. Hugo Casartelli decano de la FACI-SA UNE, quien en una ocasión le comentó que podía acceder a la carrera de enfermería en dicha institución sin la realización del curso probatorio ya que por ser de un pueblo origina-rio dicho proceso lo tenía exonerado, esto por normativa de la institución, entonces la Lic. Mónica decidió emprender este gran desafío.

 

No fue fácil… añadió, con muchas dificultades, entre ellas, la más pesadas fueron la económica y la familiar, pues ya era casada y madre de cuatro hijos, además, de los desafíos propios de la carrera; las materias, los horarios de las clases y de las prácticas que le llevó a terminar en siete años la carrera, pero con audacia y gallardía como toda una leona guaraní.

 

Comenta también que ha sufrido algunas discriminaciones de parte de los profesores que por más sutiles que sean a veces golpea y duele. De los compañeros no me puedo quejar, fueron bastantes buenos y solidarios conmigo, señaló.

 

Actualmente se encuentra bastante contenta con sus logros y sueña con trabajar dentro del MSPBS para ayudar con sus conocimientos y gestión a su comunidad, recalcó. Las personas de mi comunidad necesitan de guías que les orienten en cuanto a los cuidados cuando se enferman y cuando acuden a una institución de salud, ya que muchas veces son vulnerados en sus derechos por desconocimiento, finalizó.